viernes, 27 de diciembre de 2013

"GLORIAS DE COSTA RICA", preparado por Gilda Rosa Arguedas Cortés y Byron De Ford

GLORIAS DE COSTA RICA

Preparado: Gilda Rosa Arguedas Cortés y Byron De Ford

Es importante que los costarricenses conozcan aspectos en los que hemos sido pioneros, ahora que se habla más de las fallas del país. El conocimiento y aprecio de las raíces es básico para la construcción de una identidad fuerte y de un orgullo de pertenencia. Esto fomenta unión y solidaridad. Tal vez por ello, y sin que muchos de nosotros sepamos acerca de las siguientes “glorias de Costa Rica”, estamos entre los países más felices y desarrollados del mundo.

En la enumeración no se han tomado algunos ámbitos pero la lista está abierta para que cualquier persona que lo desee agregue otra “gloria”.

1. País sin ejército. El dinero que otros países utilizan en la adquisición de armas, Costa Rica lo emplea en educación y salud.

2. Uno de los primeros países con conciencia ecológica. Gran parte del territorio lo constituyen áreas protegidas.

3. San José fue la primera ciudad en el mundo iluminada con luz eléctrica (en 1884, unos días antes que Nueva York). El dato lo publicó el New York Times para la celebración del centenario de la iluminación eléctrica de Nueva York.

4. Primer país que abolió la pena de muerte (1882); fue por decreto presidencial de Tomás Guardia Gutiérrez, a petición de su esposa Emilia Solórzano (Benemérita de la Patria).

5. Creación de la “Junta de Protección Social” para financiar la apertura de hospitales para enfermos de cualquier nivel social. Se hizo en 1842. Este hecho refleja el humanismo natural del pueblo de Costa Rica. No se hizo como un acto de política, influenciado por ideas comunistas, pues el manifiesto del comunismo estaba en proceso; es de 1848.

6. Formación del “Asilo de Incurables” para la atención de minusválidos y de personas que no podían manejarse por sí mismas.

7. Fundación de la “Gota de leche”, en 1913, para darles leche a bebés necesitados, por iniciativa de doña Beatriz, la esposa de Ricardo Jiménez.

8. Creación de la “Cocina escolar” para darles almuerzos a niños sin medios económicos.

9. Creación del “Patronato nacional de la infancia” para la protección de la niñez del país.

10. En Costa Rica todo hijo es legítimo legalmente y goza de los mismos derechos que los hijos nacidos dentro del matrimonio.

11. La seguridad social costarricense surgió al mismo tiempo que en Europa se daba la Segunda guerra mundial y se exterminaba a judíos, gitanos e incapaces.

12. En Costa Rica nunca hubo ni esclavitud institucionalizada ni mercado de esclavos.

13. Después de la Independencia se ha logrado gran estabilidad política; solo ha habido tres Repúblicas.

14. La estabilidad del colón, por más de siglo y medio, ha propiciado el comercio y la industria en el país.

15. La “Batalla de Rivas”, liderada por Juan (Juanito) Mora Porras, es considerada por muchos historiadores del Este de Estados Unidos como la primera derrota de los estados esclavistas del Sur. Ellos querían que Centroamérica fuera una tierra productora de esclavos; esta era la intención de William Walker y sus filibusteros.

16. Se estableció la enseñanza primaria gratuita y obligatoria desde 1869, para niños y niñas. Costa Rica es uno de los países con un índice de analfabetismo más bajo en el mundo. Con respecto a la enseñanza gratuita y obligatoria, hay un himno; parte de él es la estrofa siguiente:

17. “Don Jesús Jiménez, que pensó en la infancia,/ de ella la ignorancia quiso desterrar/ y un noble decreto dejó que la historia,/ cual sublime gloria, debe recordar”.

18. La tolerancia, solidaridad y amabilidad del costarricense tienen que ver con que los niños , sin importar su condición social, hayan recibido la misma educación pública.

19. En las leyes del país se establece que la vida de la mujer está sobre la del niño por nacer, en caso de tener que decidir en este aspecto.

20. Costa Rica es la única Nación que, en sus leyes, tiene el matrimonio por contrato, desde la última Administración de don Ricardo Jiménez.

21. El país cuenta con un tren transoceánico construido a principios del siglo 20 (Presidencia de Rafael Iglesias Castro)

22. En Costa Rica se construyó el primer tren de la costa pacífica de América. Se hizo entre Puntarenas y Esparza.

23. La Virgen de los Ángeles fue declarada como Patrona de Costa Rica por el Congreso y no por el Vaticano; este es el encargado de establecer los patronos de los países.

24. Después de una vacancia de diez años, a finales del siglo 19, en que no hubo obispo en Costa Rica, el Vaticano accedió a que el obispo fuera costarricense. Así, para nombrarlo, el Papa escoge de una terna que le envía el Presidente.

25. La composición musical “Duelo de la Patria”, del maestro costarricense Torres , fue la música utilizada en los funerales de la Reina Victoria de Inglaterra y de Alfonso XII de España.

26. En 1869 se fundó el Colegio San Luis Gonzaga, en Cartago, que fue la primera institución de segunda enseñanza del país.

27. En medicina, en Costa Rica se hizo la primera operación a corazón abierto. La realizó el doctor Ricardo Moreno Cañas. También, él hizo el primer cambio de sexo, con el Dr. Cubero, en 1936.

28. Clodomiro (Clorito) Picado fue el científico costarricense que descubrió la penicilina, al mismo tiempo que Alexander Fleming, quien es reconocido mundialmente por este hecho. Don Clorito hizo, además, el suero antiofídico.

29. El Teatro Nacional, de 1897, es una joya arquitectónica en la que se presentaron los mejores artistas de la época; venían de Europa, pasaban a Cuba y actuaban en Costa Rica. Jacinto Benavente dijo que San José era la primera ciudad construida alrededor de un teatro y no de una iglesia.

30. Hubo orquestas sinfónicas costarricenses desde finales del siglo 19. Hay una femenina, formada a principios del siglo 20, por Luz Machado.

31. En los días de oro de la ópera, el tenor costarricense Melico Salazar cantó como primera figura en el Metropolitan Opera House, de Nueva York. La cantante Zamira Segreda aparece como intérprete en la Scala de Milán.

32. El premio mundial del “Bel canto” fue otorgado, en 1948, a la costarricense Ligia Castro de Armijo. Concursaron 1800 personas de todo el mundo.

33. La modelo Irene (María Eugenia –Maruja– Pacheco), famosa en los EE.UU. después de la Segunda Guerra, era costarricense.

34. La primera abogada de Centroamérica y México fue Ángela Acuña de Chacón, de Costa Rica.

35. Alberto Martén, creador del Solidarismo; su metafísica del dinero es famosa en Economía.

36. Franklin Chang Díaz, primer astronauta latinoamericano.

37. Oscar Arias Sánchez, ex presidente y premio Nobel de la Paz.

38. Francisco Zúñiga, pintor y escultor, reconocido internacionalmente.

39. Jorge Jiménez Deredia, escultor reconocido internacionalmente. Una escultura suya está en el Vaticano.

40. Alejandro Morera Soto, famoso futbolista, a fines de los veintes, hizo el gol que le dio al Barcelona la primera victoria frente al Real Madrid, en España.

41. La heroína nacional Francisca (Pancha) Carrasco Jiménez de la Campaña Nacional (1856-1857) recibió póstumamente el grado de General de Brigada. Esta condecoración la convirtió en la mujer de más alto grado militar de la historia de América.

42. El Hospicio de Huérfanos de San José surgió a raíz de la guerra de 1856 y la epidemia del cólera; muchos niños quedaron sin padres y el entonces presidente, Juan Mora Porras, le encargó a su esposa buscar una solución para esos huérfanos. En 1887 se inscribió como una institución formal.

43. Se hizo “El Refugio” a principios del siglo 20. Era una institución para apoyar a muchachas que dejaban sus hogares; ahí les enseñaban un oficio.

44. Ruby Keller (esposa de Al Johnson) fue una actriz costarricense que triunfó en Broadway. Fue una de sus grandes estrellas.

45. Fernando Montealegre Ardón fue un famoso creador de dibujos animados en Hollywood; innovó la técnica para realizarlos.

46. Fernando Arce trabajó para Disney y creó la bruja de la Bella Durmiente.

47. En Costa Rica hay, desde hace muchos años, un hospital infantil y uno geriátrico para la atención de niños y ancianos; no son secciones de un hospital general.

48. El divorcio existe desde mediados del siglo 19.

49. El Asilo Chapuí fue una de las primeras instituciones psiquiátricas de América.

50. El Sanatorio Durán, uno de los mejores del mundo, se creó para el tratamiento de la tuberculosis. 

51. Costa Rica es el único país que, sin ser enteramente socialista, tiene banca nacionalizada.

52. Es el primer país que les declara la guerra a Japón y a Alemania, horas antes de hacerlo Estados Unidos, después del ataque a Pearl Harbor.

53. Juan Mora Porras nacionalizó los cementerios que habían sido de la Iglesia.

54. Adela Argüello de Jiménez introdujo la industria pesada (para construcción) en el país, a principios del siglo 20.

55. Jerónima Fernández Val introdujo la industria liviana (cigarrillos, fósforos), a principios del siglo 19.

56. El Conservatorio Castella es una institución especializada en educar niños y jóvenes con aptitudes artísticas (música, pintura, danza, escultura). Tiene 60 años de existencia.

57. Una orquesta sinfónica juvenil se hizo en 1972.

58. Costa Rica fue uno de los primeros países en efectuar transmisiones radiales con un aparato hecho por Amando Céspedes Marín.

59. La Academia costarricense de la lengua, constituida para velar por el español, cumplió 90 años de formada en octubre del 2013.

60. Costa Rica es un país modelo para la identificación de sus habitantes; desde el nacimiento se tiene un número de cédula.

61. País pionero en la producción de energías limpias; las plantas hidroeléctricas son excelentes.

62. Tomás Guardia Gutiérrez trajo a las monjas de Sión para que las señoritas se educaran para ser excelentes esposas y madres de los dirigentes del país.

63. Ideas filosóficas de diversos orígenes (Teosofía, Masonería, Iglesia Católica Liberal, Budismo, Hare Krishna, Cientología, etc.) han propiciado apertura mental y tolerancia en Costa Rica.

64. En Costa Rica nunca ha habido latifundios; desde la Colonia, los agricultores han trabajado su parcela o finca con sus familias.

65. El Liceo de Costa Rica (1887) y el Colegio de Señoritas (1888), en San José, y el Liceo de Heredia se fundaron para formar bachilleres de segunda enseñanza. La educación era laica y los graduados podían trabajar como maestros.

66. La Escuela Normal se creó, en Heredia, en 1914, en la Administración de Alfredo González Flores, para formar maestros de enseñanza primaria.

67. Las pruebas nacionales de enseñanza primaria y el examen de Bachillerato han sido siempre el “control de calidad” del Estado para confirmar el éxito de su inversión en educación; con ellos se examina tanto a los alumnos como a los educadores y a las instituciones públicas y privadas.

68. La cultura general del costarricense se basa, no solo en el conocimiento académico, sino en el aprendizaje de costura, bordado, cocina, artes industriales, pintura, agricultura básica, etiqueta y buenas maneras, en escuelas y colegios.

69. La enseñanza de computación y de inglés desde la escuela, junto con otros conocimientos y habilidades, hace que la materia gris del país sea reconocida internacionalmente.

70. Costa Rica ha alcanzado los mayores rendimientos por hectárea, a nivel mundial, en café, palma aceitera, caña y piña.

71. El Hospital del Trauma, del INS, recién inaugurado, es único en América por su concepción, equipo y especialistas.

72. El país cuenta con el Museo de los Niños, institución concebida para el conocimiento y disfrute de un público infantil; el edificio donde se encuentra fue una penitenciaría.

73. El Museo Nacional está en un antiguo cuartel militar; esto muestra nuestra vocación de paz.

74. Las primeras carreteras del país fueron diseñadas y construidas por ingenieros costarricenses que trabajaban para el Estado, en el MOP; estos profesionales tenían no solo conocimiento académico sino también sobre la topografía, el suelo y el clima de Costa Rica.

martes, 24 de diciembre de 2013

Freddy Pacheco León escribió: "DERROTAS RECURRENTES DE NICARAGUA EN LA HAYA"

DERROTAS RECURRENTES DE NICARAGUA EN LA HAYA

Freddy Pacheco León*

Tal vez porque es algo inusual en las relaciones internacionales de Costa Rica, el asunto de la incursión nicaragüense al territorio limonense de isla Portillo quizá no es comprendido plenamente por nuestra ciudadanía. Y es que después de acudir a la Organización de los Estados Americanos, presentar el caso en otros foros continentales y hasta soportar el insultante actuar de la “corte” centroamericana de justicia con sede en Managua, creemos que algunas personas no tienen claro lo que es y puede hacer la Corte Internacional de Justicia (CIJ) con sede en La Haya, Holanda.  Parece olvidarse que es el tribunal de justicia más importante de la ONU, con la capacidad de emitir resoluciones de cumplimiento obligatorio para los Estados bajo su jurisdicción, y con formalidades de forma y fondo propias de su responsabilidad, que tiene el deber de estudiar los casos como parte de un debido proceso estricto donde no caben las ocurrencias ni las influencias interesadas.

Recordemos que antes del conflicto actual, se hubo de acudir a la Corte para defender el derecho a la LIBRE NAVEGACIÓN que tiene Costa Rica, a perpetuidad, por parte del nicaragüense río San Juan, que estaba siendo obstaculizado por el gobierno nica. Así, luego de una excelente participación del destacado cuerpo profesional estructurado por la Cancillería tica, el ente de las Naciones Unidas determinó que las embarcaciones costarricenses, INCLUSO CON TURISTAS, tienen derecho a navegar sin tener que pedir permiso ni pagar impuesto alguno, según un horario razonable determinado por las autoridades del país dueño del río. Trascendental decisión pues el argumento del equipo de juristas de la contraparte alegaba que dicha libre navegación solo podía hacerse con “objetos” de comercio, y no con “OBJETO” de comercio, como lo defendió exitosamente el equipo costarricense.

Resuelto el conflicto a favor de Costa Rica, se presentó luego la desastrosa “aventura” de la “INVASIÓN” de soldados del ejército nica al mando del comandante Edén Pastora, al territorio de isla Portillo, al norte de la gran isla continental de isla Calero. Como no hubo razones atendibles y el régimen de Daniel Ortega, siguiendo el consejo de asesores como Jaime Incer, Mauricio Herdocia, Rosario Murillo, y el mismo Pastora, reaccionara afirmando que aquél primer caño excavado, no era más que el que planteara el árbitro General Alexander a fines del siglo XIX, como el que marcaba el límite entre ambos países, Costa Rica se vio en la necesidad imperiosa de acudir nuevamente al tribunal con sede en La Haya.  Al hacerlo, solicitó medidas provisionales para que los invasores no pudieran culminar su meta de conectar el río San Juan con la laguna de Los Portillos (laguna de Harbor Head), con lo cual el evidente daño ambiental al rico humedal y el avance de las pretensiones nicas de fijar un nuevo límite ¡a costas de parte del territorio soberano costarricense! pudieren afirmarse en el tiempo.  De esta forma, la Corte nuevamente emitió un fallo desfavorable a Nicaragua, ordenando a los invasores SACAR SUS BOTAS MILITARES del territorio técnicamente en disputa, y permitiendo a los costarricenses, exclusivamente, ingresar al mismo en labores de conservación ambiental.

Sin embargo, confundidos en sus derrotas, los gobernantes nicaragüenses no solo incumplieron la ordenanza de la Corte, sino que, de acuerdo con el comandante Pastora, procedieron a excavar DOS NUEVOS CAÑOS (¡de quién sabe cuántos más que pensaban hacer!) con la evidente intención de crear un delta con numerosos canales que hubiera hecho difusa y más ancha, la desembocadura del río San Juan ¡a través del territorio costarricense! Ante esos hechos, y en forma ágil nuestra Cancillería acudió nuevamente a La Haya solicitando nuevas medidas provisionales, para evitar mayores perjuicios. Los magistrados así lo entendieron, y en una nueva derrota para el equipo de juristas de la cancillería nica, se ordenó la inmediata salida de los soldados de Ortega, al tiempo que se les dio DOS SEMANAS para que rellenaran las trincheras recién construidas cerca de un campamento militar, que el comandante Pastora había instalado en la playa de la costarricense isla Portillo, alegando que la playa no formaba parte de la isla…

Como las lecciones recibidas de parte del equipo de la Cancillería de Costa Rica ya eran frecuentes, el gobierno de Managua corrió en busca de algo que le permitiera MITIGAR AL MENOS los golpes que erosionaban su autocalificada “gran experiencia y capacidad” en derecho internacional. Surge así la injustificada acusación de que con la construcción de la Ruta 1856, todavía a nivel de trocha rural, Costa Rica “estaba destruyendo la navegabilidad del caudaloso río San Juan” y los ecosistemas de la gran cuenca. ¡Había que tratar de “EMPATAR” con alguna acción! y lo único que se les ocurrió era demandar a Costa Rica por los supuestos daños provocados por una carretera en construcción.

Y así lo hicieron, atropelladamente, primero ante la “corte” Centroamericana de Justicia, con sede en Managua y muy “contaminada” por el gobierno de Ortega y el ejército nicaragüense. Ente, que pese a no tener jurisdicción sobre Costa Rica llegó al extremo de emitir un fallo condenatorio, tan insustancial que SE LO LLEVÓ EL VIENTO suave que corre por el río.  Luego de ese esperado fracaso, los “expertos” nicas llevaron los mismos argumentos a La Haya, a la Corte Internacional de Justicia, a donde demandaron, tímida e indirectamente, medidas cautelares que obligaran a Costa Rica a deshacer todo lo hecho y regresar el territorio por donde corre la trocha a su estado anterior.  Al no recibir una respuesta favorable, insistieron en una nueva solicitud de medidas provisionales, también con similares argumentos pero, igualmente, SIN presentar pruebas que, al menos, sustentaran su “urgente” solicitud.

De esta forma se llegó al recién pasado viernes 13 de diciembre, en que en un fallo unánime y contundente, los señores magistrados de la CIJ le comunicaron a ambos países y al mundo, que “las circunstancias actuales no son tales como para que la Corte indique medidas provisionales”. Pues el equipo jurídico costarricense, con argumentación sólida, hizo evidentes GRAVES FALLAS en el accionar del grupo jurídico nicaragüense, que no solo acudió a La Haya con solicitudes de medidas provisionales sin sustento técnico y antojadizas, sino que no podían ser tomadas como tales de parte de la Corte Internacional de Justicia, sin que hubiere caído en determinaciones prejuiciadas con respecto al fondo de la demanda nicaragüense.

Además, el equipo de la cancillería costarricense, logró demostrar, ¡y la Corte así lo acogió!, que no existía LA URGENCIA reclamada por Nicaragua en el tanto no hay amenaza real e inminente de daño irreparable mientras la Corte dicta una decisión final. Que Nicaragua no pudo demostrar un aumento sustancial de SEDIMENTOS hacia el río, ni algún efecto eventual a largo plazo que afectara su navegación. Y en cuanto al alegado efecto sobre los ecosistemas y diversas especies en particular propias de los humedales, la Corte coincidió con Costa Rica en cuanto a que Nicaragua jamás explicó como los trabajos en la ruta 1856 pondrían en peligro tales especies, las que además no fueron identificadas con precisión.  NO se demostró por tanto (dice la Corte) que exista un daño real e inminente irreparable hacia los derechos invocados por Nicaragua.

Pero algo increíble es que, pese a la claridad del fallo de la Corte, el embajador nica en La Haya y “expertos” como un señor Herdocia, sacando de contexto párrafos la resolución para darles interpretaciones ANTOJADIZAS, pretenden mitigar el golpe recibido diciendo que la Corte prohibía a Costa Rica la continuación de los trabajos de construcción. Con lo que ocultaban que la detención de los trabajos fue por circunstancias administrativas relacionadas con hechos de corrupción que se encuentran en los tribunales de justicia costarricenses, ¡jamás por los sucesos en La Haya!  Por eso, ya se presupuestaron las obras y se avanza en la recuperación del tiempo perdido, muy diferente a lo que afirman adláteres de Daniel para confundir al pueblo nicaragüense.

No tenía importancia pues de cuál NACIONALIDAD eran los expertos contratados por nuestra Cancillería, ni de qué COLOR eran las togas usadas en las audiencias; de lo que se trataba era, de conformar un equipo de excelencia, responsable, trabajador, que nos representara según los requerimientos de los costarricenses y que, de paso, le diera un par de lecciones a un conjunto de profesionales que Nicaragua había conformado con una esperanza pero pobre en su accionar, como lo demostraron los resultados favorables a Costa Rica.



*Doctor en Biología.

jueves, 19 de diciembre de 2013

CONTRASTES HISTÓRICOS: ÁMERICA LATINA Y ÁFRICA.

CONTRASTES HISTÓRICOS: ÁMERICA LATINA Y ÁFRICA.

Tanto que polemizamos en América Latina sobre los excesos y abuso de los españoles en las épocas de la conquista y colonización de América, el Nuevo Mundo. ¿Acaso eran querubines nuestros aborígenes, los primeros habitantes de los inmensos territorios explorados?  

La historiografía pone al descubierto que las civilizaciones precolombinas practicaron también  las guerras, las masacres, la esclavitud,  los sacrificios humanos y otros comportamientos ampliamente destructivos, los cuales traumatizaron a los forasteros, que enseguida comenzaron a dominarlos.

Ciertamente, el proceso civilizatorio americano, desencadenado tras el conflicto entre indígenas y españoles estuvo signado de prolongadas sublevaciones sangrientas, tal que las estructuras políticas y la economía extractiva de metales preciosos, generadoras de riquezas a favor de la Corona, justificaron el inicio de la separación y la división de clases, así como los primeros síntomas de diferenciación racial;  una honda complicación de la cual el nuevo continente tampoco fue ajena.

Excepto la inequidad económica y social, producto de la sociedad colonial, la cual arrastra todavía el Siglo XXl, las segregaciones y los odios raciales y culturales entre españoles e indígenas, tuvieron la particularidad de ser apaciguados. Eso fue lo positivo de un reconocido encuentro de culturas, acentuado a través del surgimiento de las independencias nacionales y la formación de los Estados soberanos;  aunque lejos de erradicarse, principalmente  en puntuales latitudes del Nuevo Mundo, donde continúan persistiendo  los efectos  indeseados de carácter racista.      


El resultado del encuentro de culturas entre ambos grupos étnicos (españoles e indígenas), en un medio geográfico específico, devino en la constructiva conformación de una renovada sociedad biológica, con identidad psicosocial, comunicación e interrelación lingüística propias, cuyo poderío llegó casi a generalizarse en toda la población de gran parte del territorio americano.

En el terreno de la ética y los principios morales la emergente  civilización iberoamericana, además de fundamentarse en la doctrina y el mensaje cristiano, posteriormente  se nutrirá de  los valores liberales. Bien lo destaca  Álvaro Orozco Saborío, esto último  fecundado  por los mejores aportes de la Revolución Francesa, el Acta de Independencia de los Estados Unidos de América, la tradición de la Carta Magna Inglesa, el legado  greco-romano mediante la reiteración de la Constitución de Cadiz (1812) en la mayoría de  nuestras historias constitucionales,  cuyos textos estuvieron  liberados  de prejuicios secularistas y elevados  a la plenitud de la evangelización, heredada de España.

En cambio,  el continente negro lamentablemente careció de la experiencia histórica y cultural de haber contado en el proceso de conquista y colonización con un imperio colonial como el de España, mucho menos opresor y racista que sus adversarios europeos.  

De ello habla por sí solo el testimonio histórico y moral, que representa la  irreparable pérdida del líder africano Nelson Mandela, quien nos deja también infinitas lecciones, derivadas de su magnanimidad y espíritu superior, al enfrentar, sin temores,   las raíces del odio racial, la crónica injusticia e indignidad, la expoliadora “economía blanca”, así como la acumulación de estragos de distinta índole, originados desde mediados del Siglo XVll por algunos imperios europeos, siempre en perjuicio de los pueblos del África del Sur.  

En este caso,  las naciones sojuzgadas y ensangrentadas  por el apartheid y la segregación étnica, en especial Sudáfrica,  deberían continuar exigiendo justas reparaciones económicas  por parte de los países colonizadores europeos, a efecto de dar puntual seguimiento a las resoluciones que en este sentido se aprobaron en la Conferencia Mundial Contra el Racismo del 2001.   Por qué no pensar que  este compromiso constructivo como tal de las antiguas potencias coloniales honrará el inmortal mensaje del líder negro  que colocó  los principios de la reconciliación por encima de las sórdidas pasiones y los egoísmos humanos. FELIZ NAVIDAD A TODOS.


Ronald Obaldía González (Opinión personal)

miércoles, 11 de diciembre de 2013

DOÑA HAYDEE DE LEV:

DOÑA HAYDEE DE LEV:

GRAN MUJER Y ACTRIZ, TUVE EL HONOR DE ORGANIZAR CON ELLA UNA MISIÓN CULTURAL A NICARAGUA, EN UN ENTORNO SUMAMENTE DELICADO DE LAS RELACIONES ENTRE AMBAS NACIONES. JUNTO CON EL EMBAJADOR EDGAR UGALDE, EN AQUEL ENTONCES NUESTRO REPRESENTANTE EN ESE PAÍS, NOS OCUPAMOS DE LA TAREA DE SUAVIZAR LAS TENSIONES A TRAVÉS DEL TEATRO. CONSEGUIMOS TIQUETES AÉREOS GRATUITOS Y ALOJAMIENTO PARA DOÑA HAYDEE Y SU GRUPO, LA CUESTIÓN ES QUE SE DIO LA PRESENTACIÓN ARTÍSTICA EN MANAGUA. NUESTRA ACTRÍZ, CASI AL FINAL DE SU EXITOSA CARRERA, SOLO DESEABA CONTRIBUIR A LA CAUSA DE LA FRATERNIDAD Y CONCORDIA PONIENDO AL SERVICIO DE LAS DOS NACIONES TODO SU TALENTO ARTÌSTICO Y SU ELEVADO ESPÍRITU. BENDICIONES HACIA LO ALTO A ESTA GRAN Y GENEROSA DAMA.

RONALD OBALDÍA GONZÁLEZ.

lunes, 2 de diciembre de 2013

LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE COSTA RICA: CONVERGENCIA DE DISTINTOS INTERESES SOCIALES.

LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE COSTA RICA: CONVERGENCIA DE DISTINTOS INTERESES SOCIALES.


Buena parte de las conclusiones de nuestros comentarios  destacan la solidez, el  sostenimiento y  la vigencia que manifiestan tener  las bases  dogmáticas y  orgánicas de la Constitución Política de Costa Rica,  la cual actualizó en 1949 la entonces existente, liberal, Carta Magna de 1871.  

Sean una comparación los argumentos políticos de la señora Michelle Bachelet,  expresidenta y actual candidata presidencial respecto a la apremiante necesidad de reformar, con aditivos socialistas de su propia denominación,  la Constitución Política de ese país.

Redactada en tiempos de la dictadura de Augusto Pinochet, de cuya influencia neoliberal se ha despojado parcialmente la sociedad chilena, la Carta, según el partido de la Concertación arrastra  la tesis de la  democracia guiada y “eficientista” a favor del funcionamiento del mercado sin restricciones.    

Resulta que en la culta y progresista nación suramericana el trauma de la dictadura militar es todavía  factor determinante de división, por la que interactúa  a la vez el irreconciliable bipartidismo, colocándose en medio de ello el cuestionamiento de la legitimidad de la Constitución Política.  Un fenómeno bastante sensible en el caso particular de una economía emergente como la chilena.

Es decir, esa nación todavía registra serias grietas en cuanto a cohesión social.  El desacuerdo  entre las dos fuerzas políticas preponderantes (la derecha y la izquierda) alrededor de la naturaleza y repercusiones ideológicas  de la Constitución Política, pone en entredicho la verdadera fortaleza de la institucionalidad formal (e informal), así como los arreglos políticos de ese país, cuya reconstrucción nacional,  tras la desaparición de la dictadura militar hace casi 25 años, ha traído consigo deficiencias en el sistema educativo, desigualdad social y  severos contrastes entre su envidiable crecimiento económico y las políticas de distribución de la riqueza.       

Entretanto, la  Constitución Política costarricense llegó a  ser una fórmula de justicia social en el contexto histórico de su confirmación (Iván Molina y Steven Palmer, 1997),  al igual que a  través de los tiempos ha sobresalido como  un factor jurídico y político de gobernabilidad,  con la suerte de que los distintos sectores políticos sobre la base de la Constitución liberal, se han interrelacionado (o transado) para tomar decisiones colectivas y solucionar conflictos, conforme a un sistema de normas y procedimientos (Jean Paul Vargas, 2007)  e institucionalidad abierta, dentro de lo cual se continúan formulando los particulares  intereses y las estrategias de persuasión.   

Justamente, los más altos grados de conflicto de Costa Rica han sido contenidos y procesados pacíficamente por la vía de la Constitución Política y el ordenamiento jurídico. Lo puso de manifiesto la  organización del referéndum popular, el cual, sin menoscabo de la gobernabilidad,  dio lugar a la aprobación del controvertido Tratado de Libre Comercio entre Costa Rica y los Estados Unidos de América. 

Mediante el citado referéndum el gobierno,  los partidos políticos, los sindicatos, las cooperativas, las organizaciones académicas, las  cámaras empresariales, etcétera, emplearon sus “recursos de poder” y de movilización para dar como resultado una decisión, sustentada en  los principios de la democracia participativa, intrínseco en ello  “la obediencia cívica del pueblo”.

En nuestro país carece de sentido  la sugestiva y rimbombante aseveración de intentar otro “proyecto país”  empleado por no pocos foros nacionales, dizque para  incentivar “el  cambio social”, o retroceso, según nuestro criterio.    La universalidad y la profundidad de los fundamentos filosóficos y jurídicos  de la Constitución Política de Costa Rica, y de sus otras normas flexibles le han permitido su adaptación a los tiempos cambiantes.

La Carta Magna ha tenido la virtud de ayudarnos a prevenir complicadas fragmentaciones sociales, así como dotarnos de un Estado de derecho, capaz no sólo de concebir sistemas judiciales para guiar las relaciones económicas, políticas y los contratos privados y sociales, sino también como fórmula de control político, indispensable para atenuar y “autorregular”  los grupos de mayúscula influencia (Jean Paul Vargas, idem) tanto de la sociedad política, como  de la sociedad civil.    

Así entonces, nuestra democrática y pluralista Carta constitucional, como “expresión de vida política”,  ha refugiado a todas las tendencias o corrientes de pensamiento que salieron a relucir desde 1949.  

De ahí que sea un proyecto fallido la proposición de invocar  una nueva constituyente, puesto que todos los sectores y agentes políticos cuentan con peso real en ese gran texto nacional, garante de libertad y de derechos sociales e individuales fundamentales.  Y en política, renunciar al poder y a las reglas seguras que "entretejen el juego de los intereses" y los objetivos estratégicos son de los pecados capitales más graves.    

RONALD OBALDÍA GONZÁLEZ  (OPINIÓN PERSONAL)