jueves, 29 de diciembre de 2022

MISCELÁNEAS POLÍTICAS DEL 2022. Autor: Ronald Obaldía González

 MISCELÁNEAS POLÍTICAS DEL 2022. Autor: Ronald Obaldía González

Seguidores de la doctrina filosófica del subjetivismo, nos hemos abocado a seleccionar, de forma antojadiza, los incidentes del 2022, los cuales realmente han atraído nuestra atención: algunos previsibles otros del todo inesperados, según lo pone de manifiesto Richard Haass, presidente del Consejo estadounidense de Relaciones Exteriores, al compás de los impactos o mejor dicho, estragos (aleccionadores) que a nivel de la esfera global comprometen a los Estados nacionales a desplegar todos los recursos e instrumentos a su haber.
A pesar de las contingencias, nos ha interesado en el 2022 la positiva reacción y la respuesta del grueso de la comunidad mundial, en cuanto a hacerle frente a nacientes e inusitadas complicaciones, inmersas en los ámbitos geopolíticos, social, económico – comerciales. A lo cual añadimos los persistentes defectos de las estructuras sanitarias y de salud pública, en cuenta lo concerniente a las limitaciones de la asistencia humanitaria, respecto al abordaje de las emergencias ambientales, los desastres y los irregulares flujos migratorios; aparte de los que podrían sobrevenir.
GOBIERNO TIMORATO. En nuestro escrito no podemos echar de menos disciplinas domésticas de la realidad de Costa Rica. Pensamos que hacer mención del gobierno del Presidente Carlos Alvarado Quesada (2018 - 2022) es un aceptable comienzo.
Lo cierto es que el poder desinformativo y tergiversador de algunos medios de comunicación, así también los troles de las redes (anti) sociales moldean, para mal o bien, la opinión del público. Una de las genuinas víctimas llegó a ser el gobierno del Presidente Alvarado Quesada. En especial, el odio y el rencor de una fracción del fundamentalismo religioso, perdidoso en balotaje del 2018, denominaciones políticas, observadores sesgados, entre otros, se convirtieron en las estrellas de tan indeseables prácticas; le hicieron bastante dificil la tarea al anterior gobierno.
En particular, un sinnúmero de estos agentes fabricaron ataques desproporcionados frente a la progresividad en materia de derechos humanos y la excelencia demostrada en la gestión de la emergencia en torno a la pandemia del Covid – 19. Logros asertivos de la Administración.
Adicionemos a ellos los frenos al gasto público y el inicio de la estabilidad de las finanzas estatales; innegablemente fueron objetivos de política monetaria y fiscal, injustamente, opacados por la dirigencia opositora frente a la administración gubernamental del Partido Acción Ciudadana (PAC), objetivos económicos que el presente gobierno ha mantenido vigentes y que paso a paso ponen en evidencia la rehabilitación post-pandemia del sistema productivo y financiero.
La agrupación política (el PAC) demostró falta de destrezas mientras arribó al poder, en cuanto a contrarrestar la táctica de producir información espuria, la cual fue aprovechada maliciosamente por los adversarios, con tal de que fuera digerida por la mayoría de un público mayormente desinformado que instruido, lo que lleva a extraer parcializadas conclusiones en torno a los escándalos públicos; sean tan comunes que ningún gobierno de cualesquier naciones ha sabido controlar en su totalidad.
UN INEXPLICABLE SILENCIO. El Papa Francisco hace frecuentes y correctos comentarios alrededor de los derramamientos de sangre, fustigando el escalamiento de las guerras (geopolíticas) en Ucrania, Yemen, Irán, Siria, etcétera. Sin embargo, causa confusión o más que indignación el absoluto silencio suyo, frente a los abusos y la persecución incontenibles en contra de la Iglesia Católica de Nicaragua, al igual que las detenciones de líderes opositores y los crímenes de lesa humanidad a manos del despótico régimen de la pareja Daniel Ortega - Rosario Murillo. Peregrinamente, el Pontífice argumenta estar informado de los hechos dramáticos de los que han sido víctimas los nicaragüenses. Apenas ha llegado hasta allí. Nos interrogamos si esa ambigüedad discursiva significa el vituperable salto del "Papa de Hitler" (con Pío Xll) al Papa de los Ortega - Murillo.
QUIÉN FRENA EL SISTEMA CAPITALISTA. Ha dado al traste el determinismo ideológico inherente a las tesis del marxismo leninismo, el que aseguró desde un inicio la futura y absoluta ruptura del sistema capitalista de producción, regido por los Estados Unidos de América y Europa. En estos tiempos interconectado con las vocingleras de la República Popular China, quien de manera arrogante proclama la presunta superioridad de "su peculiar sistema socialista" - habilitado a ser expandido - sobre cualesquier otros sistemas económicos y políticos,
A decir verdad, ello significa una forma de socialismo chino ampliamente totalitario, autocrático y represivo. Es protegido por un rígido Estado policial, de las vulnerabilidades suyas; el que se mantiene en vilo, habida cuenta del rechazo de reconocidos sectores contestatarios, unidos a las masivas protestas, entre ellos, los recientes disturbios contra la política del cero covid 19 del Presidente Xi Jinping.
Asimismo, palpamos los organizados por las minorías étnicas y religiosas, las que se resisten a seguir dominadas ante un régimen que restringe cruel y de modo atronador las libertades fundamentales y los derechos humanos. Al tiempo que busca desesperadamente que su economía evite entrar en barrena, a causa de la incertidumbre económica mundial tras el covid-19 (Mario Becedas).
Ambas corrientes políticas, el marxismo clásico y a ocasión el dual, ambiguo, cerrado “régimen socialista” de la China, aupado precisamente por el capitalismo “promercado”, continúan hundiéndose en la frustración, en el engaño propagandístico.
El sistema del mercado capitalista global, así como la democracia liberal, consustancial a él, se caracterizan por su elasticidad y la reforma de las disfuncionalidades, en cuenta el uso sistematizado y sincronizado de la información política, social, económica, bursátil, militar. Lo mismo que en lo tocante a las áreas de lo ciberespacial, el predominio en la exploración aeronáutica y espacial, lo relacionado con la inteligencia artificial, a la vez ocupada en las visiones de la seguridad y la defensa nacional, etcétera.
Los principales ideólogos, teóricos, rectores, operadores han sido capaces de digerir, asimilar y recuperarse de toda clase de alteraciones: desde las pandemias, las guerras mundiales, las turbulencias o estrés económicos y la volatilidad de los mercados financieros, las catástrofes, así como de las amenazas de las tendencias políticas autoritarias en curso.
Incluso, ha llegado a ser (el mercado capitalista) el gestor de las transformaciones e innovaciones científicas y tecnológicas, así también de las revoluciones en los patrones psicosociales y culturales, de los cuales resulta imposible que la mayoría de las sociedades nacionales puedan sustraerse. Habrá capitalismo para largo tiempo.
LA BARBARIE SIN FIN. Tan vergonzoso el sobreviviente carrusel que conforma el oscurantismo del Siglo XXl en el Medio Oriente y el mundo islámico, en cuya composición figuran el salafismo, el jihadismo, los talibanes, la escuela wahabista, las madrasas, el Hezbollah, los pathanes, Hamás, el engañoso y manipulador dogma chiíta de los ayatollahs iraníes (proclive a asesinar deportistas).
No dejemos de lado el grupo de las monarquías corruptas, entre otras patrañas, cercanas al terrorismo, "normalizadas" y hegemónicas en esos confines. Patrañas volcadas a degradar la condición de la mujer, e inútilmente desmentidas si hiciéramos mención en esa geografía de los fundamentos de la antropología filosófica: sean los sustentos de la civilización occidental.
OXÍGENO PARA LA HUMANIDAD. El momento más crítico desde la Segunda Guerra Mundial reside en la sangrienta e injustificada guerra entre Rusia y Ucrania, causante del aumento de los precios y la escasez de los alimentos y la energía, así como los atrasos de las cadenas de suministros (aceleradores de la inflación global y del estancamiento económico).
Es reveladora la guerra de la Europa Oriental como el terreno favorecedor del gasto y el uso de armas sofisticadas y destructivas, detonantes de una posible tercera guerra mundial (de carácter nuclear). Sin ocultar las funestas consecuencias de las discordias militares entre los Estados nacionales, desde una diferente perspectiva tiende a ser una completa equivocación reducir a la nada los ideales y los subrayados logros de la humanidad.
También en la esencia y la naturaleza de la sociedad humana prevalece la predisposición a favor de la coexistencia y la concordia entre los diferentes, igualmente las antípodas frente a la violencia y la hostilidad.
A fines de este año se ha puesto de relieve la extraordinaria y la pacífica celebración de la Copa Mundial de Fútbol; comprobación del ambiente de diversidad humana, convivio pluralista, competencia reglamentada y honrosa. Un evento deportivo el cual tuvo lugar en Qatar, una desarrollada nación islámica, que a pesar de sus tropiezos y retrocesos, intenta gradualmente modernizarse y adaptar sus valores religiosos, guardando distancia del fundamentalismo y el radicalismo mahometano.
CONFRONTAR LA DERIVA ANTIDEMOCRÁTICA. Tampoco en el año que casi finaliza puede pasar desapercibido en América el alarmante fenómeno de la elevada popularidad de Donald Trump, Jair Bolsonaro, Nayib Bukele, la familia argentina de los Kirchner.
De la parentela como tal excluyamos los dictadores ya reconocidos. Tan amenaza para el sistema democrático liberal resultan ser esos políticos autócratas y moralmente cuestionados, así también la amorfa masa de seguidores de tales disociadores, cautivados por el curso autoritario de los reiterados pronunciamientos de odio, intolerante, racista, nacionalista - populista, a la vez despectivo contra el Estado de derecho, las legítimas instituciones públicas y los postulados de los derechos humanos.
Valga destacar que el sistema democrático ha demostrado sus propias resistencias, fortalezas y capacidades disuasorias, a fin de protegerse y defenderse de sujetos de esa calaña, de los sicofantes o impostores que los impulsan. Asimismo, las instancias democráticas internacionales han puesto en conocimiento los desacuerdos con las posturas de ellos, en relación con los diversos contenidos de la agenda global.
Tal es que el candidato antisistema Trump perdió la reelección. Asimismo, le fueron desfavorables los resultados de las elecciones de medio periodo en los Estados Unidos de América. Los brasileños acaban de negarle al gobernante Bolsonaro la continuidad en el mando del Poder Ejecutivo. Por graves e inapelables actos de corrupción, el sistema judicial sentenció a la expresidenta argentina Cristina Kirchner, todo parece indicar que será inhabilitada, en lo que respecta a ocupar cargos públicos.
En el caso del presidente populista Bukele - aferrado al poder -, las organizaciones mundiales de derechos humanos han abiertamente condenado las ilegítimas y crueles sanciones suyas frente a las bandas delicuenciales de las maras, reproduciendo así la historia de violencia, registrada por El Salvador.
Obviamente, el presidente salvadoreño da la espalda a los determinantes sociales que les dan fuerza, o sea la pobreza, la desigualdad social, la inseguridad y la corrupción, cuya superación obedecería a la institucionalización de un cívico contrato social, en aras de la cohesión y la buena gobernanza (Daniel Zovatto). Eso inimaginable en esa pequeña nación, todavía dominada por élites cerradas y conservadoras. Pobres y fallidos pueblos centroamericanos.
A TOMAR LAS PRECAUCIONES EN ASIA. Una confrontación violenta puede estallar en el Asia (Richar Haass). Regímenes totalitarios y represivos como los de China y su aliado Corea del Norte constituyen fuente de tensiones y crecientes peligros geopolíticos. Razón por la que la India, Corea del Sur, Taiwán, Australia, Japón, etcétera, han dispuesto ahondar las comunicaciones y los vínculos con los Estados Unidos de América y la Unión Europea, a través de la reactivación de variados mecanismos intercontinentales de cooperación (Haass).
Cabe advertir acerca de los riesgos acarreados por la nueva doctrina de defensa de Japón. Política que “prevé un refuerzo drástico de sus medios de autodefensa” armada. Lo que representa “un giro para este país, dotado de una Constitución pacifista”, pero sujeto al tenso contexto geopolítico regional (Katie Forster). Según Washington y Europa, elevado principalmente por el expansionismo de China, esta vez, mediante su poderío militar, interesada en apropiarse indebidamente de espacios marítimos del Asia Pacífico.
Las credenciales históricas de la nación japonesa son objeto de enorme desconfianza entre los países vecinos. Un cambio en sus políticas de defensa, de hecho puede provocar desasosiego.
El régimen chino “plantea regularmente el riesgo de una vuelta gradual al expansionismo japonés” en la región, duradero desde finales del siglo XIX hasta el final de la Segunda Guerra Mundial; del cual China fue una de las principales víctimas (Forster, idem).
En dicha latitud, dejarle a Japón la vía despejada, o, en su defecto, carente de regulaciones en cuestiones de seguridad y defensa, sería agravar allí la ya erosionada estabilidad y los casi agotados equilibrios estratégicos, así pensamos por más afecto y admiración que siempre le hemos profesado a su pueblo.
UNA LABOR ESCASAMENTE CONVINCENTE. Capturamos unas notas informativas del 11 de setiembre de los corrientes, difundidas por la agencia AFP y el periódico costarricense La Nación, que dieron cuenta de las declaraciones del secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, quien achacó al fenómeno del cambio climático, las constantes olas de calor, los incendios forestales, las inundaciones devastadoras, causadas por el rápido deshielo de los glaciares, entre otros desastres.
Señaló (Guterres) que las variaciones climáticas obedecen a la indiferencia de los países más industrializados. La indiferencia conducirá “a un suicidio colectivo”. Lamentó la inédita “masacre climática” en Pakistán con 1.400 muertos, ello por inundaciones, causadas por devastadores vientos monzones. Las inundaciones afectaron a unos 33 millones de personas que se quedaron sin casa. Quedaron destruidas viviendas, negocios, carreteras, puentes y cultivos.
Para el alto funcionario internacional otros países en desarrollo (…) y endeudados, “están pagando un precio atroz por la intransigencia de los grandes emisores [de gases de efecto invernadero], que siguen apostando por los combustibles fósiles”. Advirtió que se están postergando las inversiones a favor de las energías renovables.
A nuestro limitado conocimiento en esta materia de las emergencias ambientales, distan de ser novedosas las declaraciones del secretario general de la ONU. Tienen un sabor a “refrito”, de acuerdo con el argot de los periodistas. Pocos son los que ignoran la crisis climática, hasta Donald Trump, resuelto en su histrionismo pareciera haberla reconocido.
Por eso el pronunciamiento del señor Guterres suena a alarmismo. Nos hacemos preguntas acerca de la productividad, alcances y metas asertivas de la sucesión de conferencias internacionales, abundantes en teoría y retórica, ejercicios académicos, no más; también de saturadas proclamas, discursos y parafernalia. Lo que a la postre llega a suponer la insuficiencia de acciones eficientes y productivas en la sensible amenaza contra el ambiente.
Hasta el propio Richard Haass, presidente del Consejo estadounidense de Relaciones Exteriores, calificó de fracaso lamentable la reciente reunión de líderes mundiales en Egipto relacionada con el cambio climático (La Nación, 24 de diciembre del 2022). Es la ONU, ni se le puede exigir demasiado. FELIZ AÑO NUEVO 2023, AMIGOS Y AMIGAS.